Un electrolito es una parte de un alimento que contiene una carga eléctrica cuando se consume. Más exactamente, son moléculas que se disocian en iones cargados positiva y negativamente haciendo a la misma solución eléctricamente conductora.
Los electrolitos son muy importantes en nuestra dieta y todas las formas de vida superiores requieren un complejo equilibrio de electrolitos. Ayudan a mantenernos hidratados, en regular la función muscular y nerviosa, mejorar el equilibrio ácido-base y demás, y existen muchas consecuencias negativas, si no se consigue el equilibrio correcto de electrolitos en la dieta.
Para un rápido ejemplo de cómo los electrolitos funcionan y por qué son tan importantes, tenga en cuenta las contracciones musculares. Estos trabajan debido a una reacción química que envía una señal eléctrica a través de las células musculares. Los músculos y las neuronas se activan a través de la actividad de electrolitos entre el fluido extracelular y líquido intracelular de las células. Los electrolitos pueden entrar y salir de las membranas celulares a través de estructuras de proteínas en la membrana plasmática que se llaman apropiadamente los canales iónicos. Así que para que la contracción muscular se produzca, es fundamental que haya calcio, sodio y potasio y sin estas sustancias las contracciones musculares serán muy débiles e incontrolables.
Estos son, pues, tres de los principales iones de los electrolitos: potasio, sodio y calcio (todos con carga positiva). Los iones primarios distintos incluyen magnesio (también cargado positivamente) y el cloruro (de carga negativa), hidrógeno fosfato y carbonato de hidrógeno.
Por eso es importante consumir alimentos que sean altos en potasio, magnesio, calcio y sodio.
Fuente: blogdefarmacia.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario